LIVING POLO 3: EL PETISERO, EL PEÓN DE CUADRILLA

petisero

Ser un peón de cuadrilla – o petisero, cómo se conoce en Argentina – es un trabajo como ningún otro. Demanda horas y horas de duro trabajo, comenzando muy temprano en la mañana y acabando en horas nocturnas.

El petisero es la conexión entre el caballo y el jinete. Está a cargo de verificar el estado físico y emocional del caballo. El peón de cuadrilla conoce a cada caballo en el establo tan bien como la palma de su propia mano, estando a cargo de ellos desde el momento en que nacen. Su rutina diaria consiste en revisar las condiciones físicas de los caballos, alimentarlos, sacarlos del establo para que puedan ejercitarse y practicar y, de ser necesario, enseñarles nuevos movimientos y técnicas para mejorar su potencial.

Una parte muy importante del trabajo del petisero es estético: es quien mantiene al animal limpio y arreglado. Cepilla al caballo para mantenerlo aseado, sacando tierra y barra con cepillos limpios y toallas húmedas; arreglar la crin y la cola con cepillos duros o un peine metálico; limpia los ojos y las fosas nasales; asea los cascos.

Incluso trabaja, en ocasiones, con el veterinario, ya que es quien conoce al caballo y lo vigila, y puede ser de ayuda en el diagnostico de un animal enfermo. La salud y el aspecto de un caballo son muy importantes en el polo, y por ello los petiseros son tan relevantes como los caballos o los mismos jinetes.

Fuente: Argentina Polo Day

Este es el tercer artículo de nuestra serie LIVING POLO, un interesante vistazo a nuestro día a día en el polo. ¡Esperamos que lo haya disfrutado!

 

Otras Notas de Interés:

Living Polo 2: El Herrador, el herrero del caballo.

Living Polo 4: Golosinas para caballos

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